El tráfico de mercancías en el puerto de Sevilla sufrió un fuerte retroceso en los seis primeros meses del año, en los cuales sufrió una caída de casi el 15,5%. Este importante descenso se debe a la caída de graneles y al traslado de la línea Ro Ro a Cádiz y de las de contenedores.
En peso, el retroceso se evidencia en que se movieron 360.000 toneladasmenos que en el mismo semestre del año pasado, lo que supone un total de 1,99 millones de toneladas de productos. El retroceso se debe, sobre todo, a los graneles sólidos, de los que depende la mayoría de la actividad del puerto sevillano. Estos cayeron del 1,13 millones de toneladas en los seis primeros meses del 2016 a tan solo 889.639 toneladas, según informó Puertos del Estado.
Tampoco se salva el movimiento de contenedores, que cayó un 27,5% en el mismo periodo de tiempo y pasó de los 74.334 TEUs del primer semestre del 2016 a tan solo 53.829 TEUs del 2017. Por el contrario, el transporte de pasajeros creció considerablemente, especialmente a través de los cruceros que atracan en el Muelle de las Delicias. En lo que va de año han llegado a la capital andaluza un total de 9.946 visitantes a bordo de buques turísticos, casi un millar más que el año anterior.
En el conjunto de los puertos andaluces, el tráfico de mercancías cayó un 4,3%, un volumen en el que ha tenido mucho que ver la actividad en la Bahía de Algeciras, donde la estiba cayó casi un 7% en lo que va de año.